Los esmaltes de uñas son mucho más que simples productos cosméticos que sirven para dar color a nuestras manos. Este tipo de productos cuenta con un sinfín de propiedades que otorgan a las uñas numerosos beneficios, además de un look totalmente estiloso.
Además, como todo artículo, ya sea de cosmética o maquillaje, los esmaltes de uñas se pueden utilizar de mil maneras distintas, pero sólo algunas de ellas son las más adecuadas, de ahí que existan algunos procesos explícitos en los que se proporcionan ciertos pasos a seguir.
Y por supuesto, también existen distintos tipos de esmaltados, y es que en el mundo de las uñas las posibilidades son infinitas, sobre todo si tenemos en cuenta que la variedad de esmaltes de uñas que podemos encontrar en el mercado es casi inagotable.
Todo ello hace del esmalte un concepto amplio, complejo y diverso, además de un producto muy atractivo del que aún tenemos mucho que aprender.
Si quieres saber todo lo necesario sobre los esmaltes de uñas y adentrarte en un apasionante mundo de creación, no pierdas detalle.
¡Te ofrecemos un conocimiento global!
Propiedades de los esmaltes
Los esmaltes de uñas son productos cosméticos ideados especialmente para embellecer y decorar las uñas, aunque no todos cuentan con las mismas propiedades.
Los mejores esmaltes de uñas son aquellos que, además de cumplir con su función decorativa, cuidan y respetan la estructura natural de la uña. Son formulaciones resistentes y de gran dureza, que aseguran una permanencia mayor, y además forman una capa protectora sobre la uña, proporcionando acabados cubrientes y sin estrías.
De cobertura completa y colores intensos, están formulados con filtros UV, que mantienen el color evitando la decoloración y el amarilleo de la laca.
Y lo más importante, no contienen toluenos ni formaldehídos, dos agentes que aumentan la duración del color sobre la uñas pero que resultan nocivos para la salud.
En cuanto a gamas cromáticas y acabados, podemos elegir entre infinidad de posibilidades, ya sean brillantes o mates. Desde el clásico y elegante rojo, con sus muchos tonos, hasta el nude, pasando por el marrón, el oro, el berenjena, el coral, etc.
Procesos para esmaltar
Como hemos mencionado en la introducción, existen procesos recomendados para la aplicación de los esmaltes, con el objetivo de obtener los mejores resultados y asegurar que se ajusta a lo que hemos ideado, sin manchas, errores ni excesos.
Para que te hagas una idea y puedas conseguir siempre el resultado esperado, a continuación te ofrecemos algunos pasos que te servirán de ayuda.
Paso 1: En primer lugar, vamos a iniciar el esmaltado con la aplicación de una capa de base. Como sabrás, la protección de la uña es muy importante, por lo que siempre es recomendado aplicar de forma previa una base, ya sea hidratante, nutriente, de calcio, etc., en función de las necesidades de la uña.
Comienza con el dedo meñique de una mano y ve trabajando hacia el pulgar. Una vez finalizada, repite el proceso en la otra mano.
Paso 2: Una vez aplicada la base, es el momento de esmaltar. Para ello, aplica dos capas de esmalte usando trazos suaves y largos desde la base de la uña hasta el borde libre.
Para asegurar el perímetro, aplica primero el esmalte en medio de las uñas, y después a los lados. Repite con la segunda capa cuando hayas aplicado esmalte a todas las uñas de ambas manos.
Paso 3: Ahora, aplica el esmalte en el borde libre para evitar que se pele, y elimina el posible exceso de esmalte sobre piel con un palillo de naranjo impregnado en quitaesmalte.
Paso 4: Finalmente, aplica una capa superior protectora y un producto para asegurar el secado rápido, ya sea en aerosol o en esmalte.
¡Uñas perfectas!
Tipos de esmaltado
Ahora que ya conoces las propiedades de los esmaltes y los pasos a seguir para lograr un esmaltado perfecto, te mostramos algunas posibilidades y tipos de esmaltados entre los que puedes elegir para estar siempre a la última.
¡Toma nota!
Esmaltado completo
Es el esmaltado por excelencia, mediante el que proporcionado una capa monocromática a nuestras uñas para que luzcan a la última moda y pongan broche de oro a nuestro look.
Manicura francesa
Se trata de un tipo de maquillaje de uñas muy popular. Aporta un estilo limpio y elegante tanto en manos como en pies, y ayuda a realzar el color natural de las uñas, potenciando su propio tono rosado y blanqueando el borde libre.
Es una de las manicuras más utilizadas en novias, ya que no sólo se ciñe a los colores propios de la uña, sino que permite realizar diversas combinaciones: blanco + transparente, rosa + blanco, blanco hueso + blanco, etc.
Además, también podemos obtener diferentes resultados en función de cómo maquillemos el borde libre: más moderno en el caso de que sea en color, más atrevido en el caso de que presente una forma en pico, festivo cuando le añadimos escarchas o brillantes, etc.
Manicura media luna
Y por último la manicura media luna, una elegante opción para esmaltar las uñas. Consiste en maquillar la uña completa de una color claro, o sin color, e incorporar después una capa de color que contraste con la base.
Es importante tener en cuenta que para hacer este tipo de esmaltado se requiere una gran precisión, ya que el dibujo deberá arquearse para dejar ver el primer color aplicado.
¡Todo es cuestión de práctica!
Estos son los tres tipos de esmaltados más populares, aunque como hemos dicho, las posibilidades son infinitas y los esmaltados también.
Desmaquillado
Y para finalizar, el antiesmaltado, es decir, el desmaquillado de la uña. Generalmente, se trata del primer paso antes del esmaltado, ya que normalmente contamos con restos de producto del anterior trabajo y es imprescindible respetar la higiene y desinfección de la zona.
Para asegurar un desmaquillado de éxito, os dejamos algunos pasos.
Paso 1: Impregna un trozo de algodón o celulosa desechable con quitaesmalte.
Paso 2: Presiona el algodón sobre la lámina de la uña durante unos segundos para ablandar el esmalte. Después, retira hacia el extremo del algodón en línea recta, evitando así manchar la piel.
Paso 3: Si es necesario, repite el paso tantas veces como sea necesario.
Paso 4: Finalmente, elimina los posibles restos ayudarte de un bastoncillo o un algodón enrollado en un palito de naranjo e impregnados en quitaesmalte.