Una buena base de maquillaje es para muchas mujeres imprescindible en su día a día. ¿Por qué? Aporta uniformidad al rostro y disimula casi todas las imperfecciones por grandes que sean. Aunque sólo lo conseguirás si encuentras el tono de maquillaje idóneo para tu piel.
Seguro que has visto numerosas veces esa diferencia de color que se forma entre la cara y el cuello de algunas mujeres. Causado por la aplicación de un fondo de un tono distinto al de la cara en varios tonos, más oscuro o más claro y además, no difuminarlo por el resto del cuello. O seguro que ahora mismo te ha venido a la cabeza aquellas mujeres que han empleado tanto maquillaje que parece que lleven una máscara, lo que crea un efecto descuidado y artificial.
Tanto uno como el otro, son fallos que se cometen por no haber encontrado la base de maquillaje perfecta; aquella que se funde con el color y tono de tu piel. Algunas veces, por no saber cómo aplicarla.
Y es que para encontrar la base de maquillaje idónea no sólo importa si la tienes la piel grasa, seca o mixta, también importa si tiene un matiz frío, cálido o neutro. Y, por consiguiente, si tienes una piel clara, media, morena u oscura.
Antes de nada, tienes que saber que las bases de maquillaje de cualquier línea profesional de maquillaje se numeran según su escala de color. De forma habitual, los tonos más claros reciben una numeración baja y los tonos más oscuros una numeración alta.
El equipo de maquilladores profesionales de TEN IMAGE ha recopilado los consejos que debes tener en cuenta para aplicar una base de maquillaje:
Conoce el matiz de tu piel
Antes de elegir una buena base de maquillaje, tienes que saber que la piel tiene distintos matices y tú, deberás determinar el tuyo. De forma habitual, las personas pueden encajar en uno de estos tres:
Matiz frío: pieles más azules, rojas y rosas. De forma usual, las personas que tienen matices fríos son aquellas que acostumbran a ponerse de un color rosado o hasta se queman rápidamente con el sol. Pero también son las que tienen unos ojos verdes, celestes, azules, grises o negros, con cabelleras rubias, castañas o negras. Y, aunque parezca mentira, a estas personas suelen quedarles mejor la plata que el oro…
Matiz cálido: pieles más doradas, amarillas o melocotón. Suelen broncearse fácilmente con el sol y su color de cabello natural son tonos rojizos, colorados, marrones y negros. De la misma manera que los ojos, que casi siempre son de algún tono tostado. Y si a las que tienen un matiz frío les favorece más la plata, a éstas les queda mejor el oro.
Neutro: ni matiz frío ni cálido. Se trata de una mezcla entre uno y otro.
Cuando hayas determinado tu matiz, ya podrás fijarte en la numeración que tienen las bases de maquillaje. Y… guiarte para poder escoger la tuya.
Conoce el tipo de piel que tienes
Puedes tener la piel grasa, seca y mixta. Y eso es algo que adquiere mucha importancia a la hora de escoger una base.
Si tienes la piel grasa…
Deberás usar un polvo compacto como el Wet&Dry que te proporcionará un acabado mate y natural o una base fluida como el Pure Matt make-up que contiene Phlorogine, con propiedades seborreguladoras y antinflamatorias que equilibra, hidrata y purifica la dermis. Y si como ahora, es verano, puedes probar la CC Cream, una base en crema con protección solar que no obstruye los poros y previene la deshidratación.
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Si tienes la piel seca…
Tu mejor aliado será el maquillaje en crema. Puedes usar el All-day make-up, un maquillaje con una textura cremosa de gran adaptabilidad y cobertura perfecta que te asegura un resultado natural e impecable y que está formulado con principios hidratantes, como el ácido hialurónico. Pero del mismo modo, puedes optar por el Hydralight Soft Make-up, con una textura cremosa y ligera y con Hydroviton, un activo que confiere propiedades emolientes a largo plazo.
Si tienes la piel mixta…
Puedes utilizar desde polvos compactos pasando por maquillaje en crema, hasta líquido. Ya que estamos en verano, te recomendamos el Sun Protection Make-Up, te aseguras la protección solar, tiene un acabado polvo aterciopelado y es resistente al agua.
Prueba distintas bases de maquillaje
Cuando ya tengas la base o bases escogidas, tendrás que probarlas en tu piel. Aquí es cuando casi todo el mundo falla y aplica el maquillaje en su mano… ¡error! Las manos acostumbran a tener un color ligeramente más oscuro que nuestro rostro, así que podrías confundirte y coger la equivocada. Prueba el maquillaje justo debajo de la barbilla o en el cuello, cerca de la clavícula: es aquí donde la piel se parece más a la del rostro.
Aplica la base correctamente
Ahora que ya tienes la base perfecta… sólo te queda aplicarla. Dependiendo del tipo de base que sea (polvos, crema o líquido) puedes emplearla de una forma u otra. La clave es que pongas producto por los pómulos, frente, nariz y barbilla. Empezando por la nariz y extendiendo por las demás zonas. No utilices una gran cantidad de producto pues el efecto será antiestético. Vigila cuando apliques el maquillaje en tus párpados, ya que puedes dejarlos engrasados y no serán igual de atractivos.
Y nuestro último consejo: recuerda que por mucho que quieras parecer más morena, utilizar una base de maquillaje de tonos superiores a tu piel es un error. Si quieres darle más color a tu rostro, puedes utilizar un terracota como el Desert’s colours, unos polvos que te aseguran un aspecto saludable y bronceado. Pero también puedes aportar un matiz de color al rostro aplicando un colorete como el Mineral blusher, con el que resaltarás la luminosidad gracias a su espectacular acabado satinado.