En este artículo te explicamos cómo preparar tu piel  para el verano y qué productos usar. Una serie de consejos que se inculcan en nuestro curso de estética de Barcelona, para que los profesionales del sector sepan asesorar a sus clientes con acierto. 

En invierno es muy común desatender el cuidado de la piel, ya que no tenemos la sensación de que existan demasiados factores externos que puedan influir en ella.

Sin embargo, el frío, el viento o la calefacción son elementos presentes en nuestro día a día, que pueden resultar dañinos o empeorar el estado de la piel.

Generalmente, tomamos conciencia de la situación cuando se aproxima el verano, cuando nos desprendemos de los jerséis de lana y guardamos en el armario los pantalones largos.

Es en ese momento cuando nos percatamos de que la piel no luce como querríamos, pero ya puede ser demasiado tarde para empezar a tratarla y que esté perfecta en verano.

Por ello, si quieres que en los meses de calor tu dermis luzca perfecta, tienes que empezar ya a preparar tu piel para el verano.

¡Empieza la cuenta atrás para poder presumir de una piel resplandeciente!

Estate atenta.

Cuidado del rostro

Es el primer elemento, lo primero que ven de nosotros, hecho que lo convierte en un imprescindible de la imagen al que hay que mimar constantemente.

Durante el invierno, el rostro es una de las pocas partes del cuerpo que suele estar expuesta a las agresiones que provocan el frio, el viento u otros factores.

La piel se reseca y los labios se llegan a agrietar.

Para evitar estos efectos existen diversos productos muy efectivos.

Peeling faciales

Para mejorar el estado de la piel es recomendable el uso de un peeling facial regenerador.

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Se trata de una crema exfoliante, formulada con partículas naturales que favorecen el arrastre de células muertas, y que contiene principios activos que protegen y reparan la piel.

Son cosméticos muy útiles para reparar los estragos que causa el invierno en la piel, ejerciendo sobre ella un efecto antioxidante y proporcionándole una capa protectora.

Pero esto es sólo una base con la que trabajar, ya que en verano es indispensable que la piel esté hidratada y nutrida.

Mascarillas

Otro aspecto importante para preparar tu piel para el verano es su hidratación. Para ello existen numerosos productos de uso diario y otros que se utilizan de forma semanal, ya que tienen un efecto más duradero. Es el caso de las mascarillas faciales.

En el mercado podemos encontrar diversas mascarillas, aunque en este caso las más recomendables son las que contienen elementos hidratantes y calmantes.

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Las mascarillas de alginato, por ejemplo, como su propio nombre indica, están formuladas a base de alginatos de origen marino, que tienen propiedades hidratantes, remineralizantes y calmantes.

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¡Justo lo que tu piel necesita!

Cremas

Pero si lo que buscas es un tratamiento de uso diario, otra de las claves para preparar el rostro para la llegada del verano es usar a una crema adecuada a tu tipo de piel.

Es importante que se usen cosméticos de calidad, que cubran las necesidades de la piel y que estén formulados con principios activos.

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De esta forma, un rostro que cuente con una piel sensible no usará la misma crema que alguien con un cutis con exceso de sebo.

¡Conoce tu piel y cuídala!

Bálsamo labial

Sin duda, un elemento fundamental en el rostro son los labios. Se trata de una zona delicada que cuenta con una serie de necesidades específicas.

Para su cuidado es esencial que reciban una correcta protección e hidratación, ya que es una piel muy delicada, por lo que es imprescindible utiliza productos que se hayan formulado de forma específica para tratar los labios.

Cosméticos compuestos por ingredientes como la cera de abejas, un espesante natural rico en vitaminas que aporta hidratación, o alantoína, que facilita el desprendimiento de las células muertas.

Los labios son muy sensibles a las agresiones externas como el sol, así que es recomendable que este tipo de productos tengan un factor de protección solar.

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Ahora que ya conoces algunos productos que ayudarán a tu rostro, puedes empezar a cuidar el resto del cuerpo.

Cuidado del cuerpo

En la misma línea, el cuerpo necesita renovarse celularmente, así como eliminar las impurezas. Un gel de baño exfoliante, que hidrate, que esté compuesto por partículas exfoliantes y que no reseque la piel, te irá de maravilla.

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Pero no sólo hay que exfoliar, sino que también es imprescindible nutrir la dermis para que pueda soportar los cambios de temperatura y demás hábitos del verano.

Existen principios activos como la leche de almendras, que es hidratante y nutritiva, o el extracto de cereza, de acción antioxidante, que dejarán tu piel bien cuidada y con un tacto muy agradable.

¡Ahora ya no tienes excusa para no lucir una piel de escándalo, empieza a preparar tu piel para el verano ya!