El día de la boda es considerado uno de los días más felices de nuestras vidas y consecuentemente, el más memorable. Para que el recuerdo en nuestra mente y en la de sus invitados sea de lo más impactante, la pareja pasa mucho tiempo preparando y organizando para que todo salga a la perfección. Parece una tarea fácil, pero cuadrar el día, invitados, fotógrafo y sesión, espacio, hotel, catering, decoración y un largo etcétera, es una labor que implica un tiempo y una dedicación abismal. Por eso, son muchas las parejas que optan por contratar a un wedding planner, un profesional que se encargue de organizar y preparar todas estas tareas para que los novios estén más tranquilos el día de su enlace matrimonial.
Normalmente, las mujeres nos preocupamos más por estar perfectas, ya no sólo durante la ceremonia en sí, sino también durante la sesión con el fotógrafo, el convite y la fiesta. De ahí viene que acudamos a expertos que nos asesoren con la elección del vestido, los complementos, el peinado y el maquillaje. Y es que es el conjunto de todos esos componentes lo que hace que el día de nuestra boda deslumbremos.
Antes del enlace, se acumulan muchos nervios, cansancio y estrés y eso es visible en el rostro, transformándose en una falta de brillo y sequedad. Es aconsejable ir limpiando e hidratando la piel constantemente, pero justo una semana antes del evento nupcial, hay que asegurarse que la piel está limpia, hidratada, cuidada y tersa. Y de la misma manera, nuestros labios. Si nos hacemos un peeling, eliminaremos las células muertas y conseguiremos unos labios libres de pieles y finos, perfectos para maquillar.
La novia tiene que dejar a todos los invitados encandilados y aunque es el conjunto de todos los componentes los que crean el look, el maquillaje juega un papel muy importante y se conforma como un complemento indispensable. Se trata de dar en el clavo con el estilo del casamiento, no será el mismo maquillaje el de una boda de día que de noche, o el de una ceremonia industrial que una gótica y, así de forma consecutiva. Siempre respetando el estilo y la personalidad de la novia por encima de todo.
TRUCOS DE MAQUILLAJE Y TENDENCIAS PARA MAQUILLAR A UNA NOVIA
Pieles casi desnudas
Una tendencia que está en alza son los looks nude, ya no sólo en el mundo de las novias, sino también en pasarelas, famosas y en la calle. Si estás pensando en no aplicar ninguna base de maquillaje, estás totalmente equivocada. Se trata de que parezca que no lleves maquillaje, pero que realmente sí lleves. Lo que buscamos es conseguir una piel de muñeca: limpia y radiante. Así que optaremos por aplicar una sola capa de maquillaje con un fondo como el All-day make-up que sea de larga duración y que asegure un resultado lo más natural e impecable posible. Antes de aplicar la base, habremos disimulado las pequeñas imperfecciones del rostro a partir de los correctores.
Iluminación al poder
Se llevan los maquillajes de novia extremadamente luminosos jugando con los iluminadores y la técnica del strobing. Consiste en lucir una piel resplandeciente, resaltando las facciones con puntos de luz. Lo conseguimos aplicando un iluminador como el Strobing Glow en el arco de la ceja, la nariz, los pómulos, el arco de cupido sobre los labios y la zona del lagrimal. Con esta técnica lograremos crear dimensión y dar esplendor al rostro usando de forma exclusiva luces y reflejos.
Ojos desestructurados en tonos neutros
¡Los ojos, cuánto más naturales, mejor! Sombras en tonos neutros, emulando un ahumado de líneas sencillas y redondeadas, dando un halo de romanticismo a la mirada. Los tonos más utilizados son los marrones, grisáceos y visón. En algunos casos también veremos que el ojo está delineado con el eyeliner, dando a la mirada un toque más intenso. Las sombras las veremos tanto mates, como luminosas… ¡tú eliges!
Cejas fijas
En el caso de las cejas, tienes dos opciones distintas: una es retocar su forma con un corrector de cejas de forma muy sutil y la otra es simplemente inmovilizarlas con un fijador de cejas. Gracias a ello, no se despeinarán durante todo el día (o noche) y lucirás perfecta.
Pestañas XXL
La máscara de pestañas no puede faltar este día. Si ya las tienes largas, utiliza una máscara de pestañas negra que te ayude a rizar, alargar y dar volumen. Sin olvidarnos que sea resistente al agua, ya que es normal soltar alguna que otra lágrima. Aunque también puedes optar por las pestañas postizas, siempre teniendo en cuenta que sean muy naturales, ya que pueden quedar muy artificiales.
Labios prácticamente desnudos
Igual que hablábamos de pieles casi desnudas, ahora toca hablar de los “labios desnudos”. Se llevan sin apenas maquillaje, se puede aplicar un toque de brillo en el centro de los labios para resaltarlos y darles un toque de glamour. Aunque también podemos utilizar un tono “nude” hidratante para que se vean más uniformes y jugosos. Esta tendencia de maquillaje de novia es más usual en bodas de día.
Labios intensos
También se llevan tonos muy intensos que van desde los fucsia a los naranjas, rojos o frambuesas, aunque siempre en acabado mate. Cuando maquillemos los labios, hay que asegurarse que estén completamente hidratados y preparados, ya que conseguiremos que el resultado sea más profesional y su duración sea mayor. Cabe destacar, que los colores más vivos pueden desaparecer más fácilmente, sobre todo en el centro del labio, así que pídele a tu maquillador que te preste la barra de labios para ir retocándolos cuando lo necesites.
Ahora que ya sabes lo que se lleva, lo que toca es probar todas estas tendencias de maquillaje de novias para comprobar cuál será el ideal para el día de tu boda. Y si lo prefieres, puedes acudir a un profesional para que sea su experiencia y conocimientos los que prueben distintos estilos y tonos para que el día más feliz de tu vida salga redondo.
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